Este 28 de junio volvemos a las calles, convocades por el Bloque Crítico Transfeminista (Camada Queer Castellana, Casa Feminista, CGT, CNT, Marabunta Autodefensa Feminista). Porque el Orgullo no es una fiesta vacía ni una campaña de marketing con banderas arcoíris. Es lucha, es memoria, es rabia y es deseo. Es clase obrera organizada, es resistencia contra la violencia que sufrimos cada día el colectivo LGTBIQA+. Frente a aquel orgullo que se alinea con instituciones que perpetúan la desigualdad y la explotación estructurales, que utiliza nuestro movimiento para lavar su imagen, para desvirtuar nuestra lucha, para descafeinarla, para convertirla en un día festivo y, por lo tanto, un producto más del capitalismo: exigimos un orgullo crítico y por ello decidimos no sumarnos a la convocatoria institucional y rememorar el 56 aniversario de las revueltas de Stonewall.
Queremos recuperar la memoria de las revueltas y del origen del Orgullo que, lejos de una marcha festiva y pacífica, fueron una serie de disturbios en respuesta a la segregación, la marginalidad y la constante brutalidad policial que sufrían las personas queer por el mero hecho de existir fuera de la norma. El recuerdo de les más precaries, les desahuciades y marginades de la sociedad es lo que nos mueve hoy a estar aquí y alzar nuestra voz. Esta marginación social se ceba todavía en el año 2025 con los sectores más empobrecidos de NUESTRA COMUNIDAD y con aquelles que se han negado a aceptar la normatividad y transgreden día a día los límites del sistema cisheterosexual y patriarcal.
Frente a la intencionalidad de querer borrar lo que conllevan ciertas siglas, reivindicamoslo Queer como un movimiento político que va más allá de la etiqueta LGBT, un movimiento interseccional que reivindica los derechos de las personas asexuales, las personas intersexuales, ydetodas las disidencias. Nos definimos como un colectivo que rechaza la norma, y que quiere romper moldes y patrones. El Orgullo Queer es transfeminista, antirracista, anticapacitista, antifascista, antiputófobo y anticapitalista. Es un Orgullo Crítico y, por tanto, no puede separarse de la lucha de clase.
Desde el Bloque Crítico Transfeminista denunciamos:
- El actual auge de la ultraderecha que contribuye al incremento de la violencia perpetrada tanto contra el colectivo Queer, como contra las mujeres, las personas racializadas, migradas, locas, discas, acuciado especialmente en personas con pocos recursos. Este auge se da por un giro autoritario a nivel mundial cuya última finalidad es seguir explotando a la clase trabajadora y enriqueciendo a la burguesía mundial.
- En el último año, las agresiones contra las personas queer en el estado español se han DUPLICADO afectando al 16,25 % del colectivo: más de 800.000 personas agredidas. Pero la violencia no se limita a los ataques físicos. Más de 1,2 millones han sufrido discriminación al intentar acceder a derechos básicos como el empleo, la vivienda o servicios esenciales. Muchas veces ni siquiera se nos permite llegar y cuando lo hacemos nos expulsan. Todo esto ocurre en espacios y servicios públicos, en centros educativos o sanitarios. Lugares donde deberíamos poder vivir, expresarnos y aprender con libertad siguen marcados por una sociedad machista, patriarcal y heteronormativa que nos margina, nos censura y nos ataca.
- Exigimos una educación pública, laica, inclusiva y segura, con formación real obligatoria en diversidad desde las primeras etapas y protocolos efectivos contra la LGTBIQA+fobia escolar. Y reivindicamos la necesidad de sensibilización en las aulas para que les niñes aprendan a tratar a los demás desde el respeto y la empatía. Uno de cada cuatro jóvenes queer ha sufrido acoso escolar, y en el 64 % de los casos los centros no hicieron nada. El abandono escolar en el colectivo se dispara hasta el 18,9 % y menos del 30 % del profesorado se visibiliza.
- La situación de las terapias de conversión que, aun estando prohibidas y sancionadas en todo el territorio español desde el año 2023, se siguen practicando. En enero de este año, la Asociación Española contra las Terapias de Conversión, presentó una denuncia al Ministerio de Igualdad en la que se expone que en varias diócesis españolas se están impartiendo cursos y talleres de conversión sexual para personas del colectivo. Las identidades Queer no son una enfermedad y por tanto no deben “curarse”. A esto hay que añadir la criminalización de las prácticas sexuales disidentes y de la represión contra nuestros cuerpos, vidas y espacios.
- El retroceso en los derechos de las personas del colectivo, como es el caso de Reino Unido, país en el que el Tribunal Supremo ha dictaminado que la Ley de Igualdad incluye solo a mujeres cisgénero , eliminando a las mujeres trans de la definición legal de “mujer”; o de Hungría, donde se ha aprobado una ley que prohíbe la marcha del Orgullo con multas de hasta 500€ amparándose en la “ley de defensa a los menores”.
- Un año más nos vemos obligades a hacer especial hincapié en la situación que está viviendo el pueblo palestino, denunciando un genocidio retransmitido que Israel está perpetrando contra la población palestina, movido por intereses políticos y económicos. Para nosotres el Orgullo es inseparable del resto de luchas, entre ellas la antirracista y anticolonial. Denunciamos que mientras Israel extermina al pueblo palestino, mercantiliza la lucha del colectivo reduciéndola a un mero negocio. ¡Israel no es orgullo de nada! La persecución, la violencia y la discriminación que enfrentan les palestines son desgarradoras. Desde aquí, extendemos nuestra solidaridad y apoyo, exigiendo el cese al fuego inmediato, el fin del comercio de armas con Israel y la protección y el respeto de los derechos fundamentales del pueblo palestino, entre ellos su derecho a la resistencia y a legítima defensa. Rechazamos cualquier intervención estatal que utilice nuestra lucha para justificar políticas imperialistas y de ocupación. Y denunciamos y condenamos la inacción de lasinstituciones y gobernantes mundiales ante el exterminio y la masacre del pueblo palestino.
Os decimos alto y claro que no vamos a desaparecer, que no somos mercancía, que seguiremos alzando nuestra voz en respuesta a quienes intentan negar nuestra identidad, nuestra sexualidad, en definitiva, borrarnos, propagando mensajes de discriminación y odio.
Desde aquí animamos a todas las personas dentro y fuera del colectivo a organizarnos para combatir estas violencias.
Queríamos también un día como hoy ofrecer todo nuestro apoyo a las 6 de La Suiza, a las 6 de Zaragoza, a los 7 de Somosaguas. Personas que por luchar contra un sistema cada vez más fascista y retrógrado están siendo juzgadas, van a entrar o están ya en la cárcel.
Nos quieren silenciades, sin que nos apoyemos entre todes, con miedo. Pero no podemos dejar que lo consigan, que nos amedrenten; porque el sindicalismo no es delito. Porque el orgullo es disidencia, transgresión y resistencia.