Nos encontramos con Carlos Coca este 25 de abril a las 19 h, en la librería-café Akelarre, para hablar de su obra ‘Ácratas y revolucionarios por Zamora‘. Aunque la charla tuvo lugar, como suele decirse, en “familia”, Carlos Coca no se rindió y fue exponiendo los motivos de porqué las ideas anarquistas crecieron en la Zamora de los años 30. Paraél hay tres elementos importantes:
- La construcción del ferrocarril Madrid – Galicia a su paso por la comarca de Sanabria,así como la construcción de la Presa de Ricobayo que supuso la incorporación de mano de obra de diferentes lugares como Catalunya, Asturies, Galicia, el norte de Portugal y por supuesto otras zonas de Castilla y León. Los miles de trabajadores que acudieron a estos lugares difundieron las ideas libertarias y organizativas de la CNT, donde estaban afiliados. Su contacto con las gentes de esas comarcas fueron la semilla que propició el ideal libertario hasta el punto de participar, en el año 1934,en los sucesos de la Revolución de Asturias.
- La emigración o exilio de muchos zamoranos en busca de trabajo a otras comarcas como Catalunya , Aragón o Francia donde conocían y se impregnaban de las ideas anarquistas que al volver a sus terruños contagiaban a sus paisanos. Ejemplo claro de esto es la comarca de Tierra de Campos que abarca pueblos en varias provincias, no solo Zamora, también Valladolid o Palencia donde el número de jornaleros era casi similar a Andalucía, destacando la localidad de Villalpando en Zamora o Medina de Rioseco en Valladolid, donde en octubre del 34 proclamaron el comunismo libertario.
- Por último, la difusión de prensa anarquista y confederal que llega hasta el último rincón de Zamora, allá donde hubiera un pequeño grupo que comulgara con la idea. O el desarrollo del esperanto como idioma universal en muchos de estos lugares.
Cabe citar también, nombres de personas relevantes que o bien escribieron sobre Zamora o bien nacieron y residieron en la capital o pueblos de la provincia: Elisée Reclus, Pío Baroja, León Felipe, Jacinto Toryho, Mercedes Comaposada, Baltasar Lobo, Iliá Ehrenburg, Rosa Zimmerman… El listado de nombres sería interminable.
Estas fueron las bases de unas ideas que se convirtieron en un movimiento de masas antes de la Guerra Civil y que tuvo un final fatídico tras el golpe de estado de 1936: muerte, presidio, represión o exilio.
A pesar de ese final, Carlos Coca ha encontrado retazos de memoria en los descendientes entrevistados en los diferentes pueblos zamoranos de aquellas mujeres y hombres anarquistas, soñadoras y revolucionarias.
El pequeño debate generado después demostró que en las comarcas de la hoy Castilla y León la presencia de CNT era más importante de la que se cree históricamente y habría que realizar una investigación más profunda sobre el desarrollo e influencias de las organizaciones libertarias en los años 30.